Ciudad de México, 15 de febrero del 2024.– En una sesión solemne que quedará grabada en la historia, el Congreso de la Ciudad de México ha tomado una decisión trascendental para honrar la cultura, tradiciones, e historia de los pueblos y barrios originarios, comunidades indígenas residentes, y la población afromexicana. La inscripción “A los Pueblos Indígenas Originarios y Afromexicanos” en letras de oro en los muros del Recinto Legislativo simboliza un acto de reconocimiento y respeto hacia estas comunidades fundamentales para la identidad nacional.
Jorge Gaviño Ambriz, presidente de la Comisión de Normatividad, Estudios y Prácticas Parlamentarias, destacó este homenaje como un reconocimiento a los ancestros que constituyen la piedra angular de la mexicanidad, recordando el triste declive de las lenguas originarias, donde «la muerte de una lengua equivale a la pérdida de una cultura».
Diputados de diversas asociaciones y partidos políticos hicieron eco de la importancia de este acto. Royfid Torres González resaltó la historia de exclusión y discriminación que han enfrentado estas comunidades, mientras que Andrea Evelyne Vicenteño Barrientos y Xóchitl Bravo Espinosa remarcaban la riqueza cultural que aportan a la sociedad mexicana, enfatizando la necesidad de una sociedad más incluyente y el reconocimiento de su importancia en la configuración de la capital como un crisol de culturas.
La celebración de este acto no solo es un reconocimiento a la diversidad cultural de México, sino también un compromiso por parte de los legisladores, como lo expresó José Martín Padilla Sánchez, de trabajar por no legislar en contra de los intereses de estos pueblos. Gabriela Quiroga Anguiano del PRD, Ernesto Alarcón Jiménez del PRI, Frida Jimena Guillén Ortiz del PAN, y Héctor Díaz Polanco de MORENA, todos concuerdan en la importancia de este reconocimiento para combatir la discriminación y asegurar el pleno respeto e inclusión de las comunidades originarias y afromexicanas.
Este evento contó con la presencia de representantes de los pueblos indígenas, así como figuras políticas relevantes, uniendo voces en el llamado a una mayor inclusión y reconocimiento de estas comunidades esenciales para la historia y el futuro de México.
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