CDMX a 6 de abril, 2024.- En una medida sin precedentes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha ordenado la suspensión de todas las relaciones diplomáticas con Ecuador. Este drástico paso se produce después de que la Policía Nacional de Ecuador irrumpiera en la embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas, a quien México le había otorgado asilo político.
La acción de la policía ecuatoriana, descrita por López Obrador como «una violación flagrante» a la soberanía mexicana, ha provocado una crisis diplomática entre los dos países. El mandatario mexicano utilizó su cuenta de X para comunicar este incidente al mundo, detallando cómo fue informado por Alicia Bárcena, la secretaria de Relaciones Exteriores de México, sobre el inaudito suceso.
La decisión de suspender las relaciones diplomáticas se anunció junto con el plan de México de emitir un comunicado oficial sobre los hechos y tomar las acciones legales pertinentes. Esta medida incluirá la salida inmediata del personal diplomático mexicano de Ecuador, quienes deberán recibir todas las garantías necesarias para su retorno seguro a México.
Este incidente no solo marca un punto de inflexión en las relaciones entre México y Ecuador sino que también plantea preguntas sobre el respeto al derecho internacional y la inviolabilidad de las embajadas, principios fundamentales de las relaciones internacionales.
Las repercusiones de esta crisis van más allá de las relaciones bilaterales, afectando potencialmente la cooperación regional y el diálogo entre los países latinoamericanos. A medida que se desarrolla la situación, la comunidad internacional observa de cerca, esperando una resolución que preserve el respeto mutuo y la soberanía nacional.
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